La Unión Europea negocia con Estados Unidos para buscar un acuerdo comercial
La Unión Europea (UE) ha intensificado las negociaciones con Estados Unidos para posibilitar un acuerdo antes del 9 de julio, con el objetivo de frenar la escalada arancelaria impulsada por la Casa Blanca. Desde que Trump anunció el 9 de abril una suspensión temporal de los aranceles recíprocos por 90 días, la UE decidió también pausar durante ese periodo sus contramedidas a los aranceles estadounidenses sobre el acero y el aluminio. Esta decisión permitió abrir un periodo de diálogo centrado en encontrar una solución negociada.
En el marco de estas conversaciones, el comisario europeo de Comercio, Maroš Šefčovič, se ha reunido con representantes estadounidenses para plantear la eliminación de aranceles sobre bienes industriales, incluidos los automóviles, así como para fomentar la cooperación en sectores como la energía y la tecnología.
El 30 de mayo, Trump anunció que los aranceles al acero y al aluminio aumentarían del 25% al 50% a partir del 4 de junio. Estos gravámenes, junto a los ya existentes sobre automóviles y componentes, se mantienen vigentes durante las negociaciones. En respuesta, la Comisión Europea reiteró su disposición a alcanzar una solución aceptable para ambas partes, pero advirtió que, si no se logra un acuerdo, las contramedidas europeas, tanto las ya aprobadas como las adicionales, entrarían en vigor el 14 de julio o antes si las circunstancias lo requieren.
Según la Comisión, los aranceles estadounidenses afectan al 70 % de las exportaciones europeas hacia Estados Unidos, con un impacto estimado en torno a 382.000 millones de euros. La automoción, con 66.000 millones de euros en exportaciones, y el acero, con 26.000 millones, figuran entre los sectores más afectados.
En este contexto, la UE ha diseñado una doble vía de actuación. Por un lado, ofrece incentivos omo el impulso a las inversiones en energía, el desarrollo de cooperación en redes móviles 5G y 6G, y la colaboración estratégica en sectores como el acero, el aluminio, los semiconductores, los productos farmacéuticos y los automóviles. Por otro, prepara dos paquetes de contramedidas. El primero, aprobado pero suspendido hasta el 14 de julio, incluye aranceles del 25 % sobre productos estadounidenses como soja, textiles o maquinaria. El segundo, en fase de consulta pública hasta el 10 de junio, contempla aranceles sobre importaciones valoradas en 95.000 millones de euros, entre las que figuran aviones, automóviles, productos químicos y bebidas alcohólicas. También se propone restringir exportaciones europeas de chatarra de acero y productos químicos a Estados Unidos por valor de 4.400 millones de euros.
En paralelo, la Comisión Europea ha señalado que podría iniciar una disputa ante la Organización Mundial del Comercio, al considerar que los aranceles estadounidenses violan las normas fundamentales del organismo.