Begoña Echaburu (Mondragon Unibertsitatea): “En Euskadi somos buenos en planificación de negocio, el reto ahora es la gestión del talento”
Mondragon Unibertsitatea trabaja hace años desde la investigación aplicada para ayudar a las organizaciones vascas a afrontar los retos del presente y del futuro. Desde el Centro de Investigación en Gestión Empresarial MIK -integrado en la Red Vasca de Ciencia y Tecnología-, el Equipo I+T de Personas y Talento acompaña a las empresas en sus procesos de desarrollo organizativo, con especial foco en la gestión del talento, su atracción y desarrollo, así como en la cultura organizativa y la transformación organizacional.
Su coordinadora, Begoña Echaburu Mulet, destaca que las transformaciones sociales, tecnológicas y digitales que atraviesa la industria vasca exigen que las empresas reconsideren el papel de las personas. “Hasta ahora hemos puesto mucho esfuerzo en innovar procesos, productos o servicios, y eso nos ha llevado a ser lo que somos hoy, pero necesitamos dar un salto cualitativo que lleve a las organizaciones a reflexionar sobre qué es el talento para ellas, cómo situarlo en el centro de su estrategia y generar contextos para su desarrollo y fidelización”, señala.
Echaburu insiste en que muchas empresas comienzan a diseñar iniciativas para atraer o desarrollar talento sin haber definido primero qué significa ese concepto en su propio contexto. “A veces nos quedamos en una visión muy restringida, centrada en ciertos perfiles críticos. Pero si hiciéramos una reflexión más amplia podríamos atraer mayor diversidad y descubrir posibilidades que también pueden apoyar la estrategia de negocio”, explica.
En su opinión, la demografía, la diversidad y los cambios en la relación con el sentido del trabajo son factores que condicionan cada vez más la captación de talento. “Estamos entrando en escenarios nuevos en los que la diversidad será un elemento clave para seguir siendo proyectos sostenibles”, afirma.
Otro de los retos es el aprendizaje continuo. Aunque el tejido productivo vasco cuenta con profesionales altamente formados, la rápida evolución tecnológica exige nuevas formas de adquirir y actualizar competencias. “La recualificación nos obliga a mirar más allá de un concepto clásico de formación. Tenemos muchos recursos dentro y fuera de las organizaciones, y es necesario aprender a gestionar para mantener un aprendizaje a lo largo del tiempo, y pasar de la formación al aprendizaje”.
Porque atraer talento es un reto, pero fidelizarlo lo es aún más. “Si queremos que las personas no solo se incorporen, sino que quieran quedarse y desarrollar su proyecto profesional y vital en nuestras empresas, debemos construir entornos en los que puedan aportar y crecer”, concluye.
El Grupo SPRI da apoyo a la empresa vasca mediante programas de ayuda para facilitar transición tecnológica-digital, la energética-medioambiental y la social y sanitaria. Encuentra el programa que mejor se adapta a las necesidades de tu negocio.